“ | En resumen, nos hemos preparado para la guerra con el enemigo equivocado. Esto es algo nuevo... | „ |

En el sentido del reloj: Aparición estelar de Blackwatch en Times Square; Soldados Specter protegiendo el Madison Square Garden ante el contraataque del ejército infectado; Detonación nuclear en el Océano Atlántico; Batalla del Reagan; Batalla de Times Square; Tiroteo de Penn Station.
La Operación Redlight fue el nombre en clave de la acción militar realizada por el Primer Comando de Guerra Biológica durante el otoño del 2008, en respuesta al brote del virus Blacklight en la isla de Manhattan. Con un saldo desconocido de bajas militares, y millones de muertes civiles, la Operación Redlight sería la primera acción militar pública de Blackwatch, mostrándose por primera vez ante el pueblo estadounidense desde su establecimiento en 1962, y cometiendo atrocidades para contener la amenaza biológica que representaba el virus Blacklight.
Antecedentes[]
Artículo principal: Proyecto Blacklight
A finales de 1988, Blackwatch subcontrató la compañía Gentek para expandir su investigación del virus Redlight, luego de abordar al Dr. Raymond McMullen tras su publicación de secuencias no codificantes en el ADN y la memoria genética. Para el 1 de enero de 1989, con el traslado de Elizabeth Greene al edificio de Gentek, Blackwatch se convirtió en un colaborador secreto de Gentek.

El hombre responsable de abrir las puertas del infierno: Alex Mercer.
En algún momento de 1999, Alexander J. Mercer, un joven graduado de la Universidad de Columbia, fue reclutado por McMullen con la propuesta de trabajar en un proyecto que cambiará al mundo: el Proyecto Blacklight, una iniciativa de investigación militar cuyo propósito era el estudio y la armamentización de las múltiples cepas y variantes del virus Redlight.
Tan solo tres años después de su contratación por Gentek, Alex Mercer se convirtió en jefe del Proyecto Blacklight, luego de desarrollar exitosamente la cepa artificial DX-1118 C. Su hazaña fue realizada aún sabiendo la verdadera naturaleza de su trabajo como un proyecto de armas biológicas, afirmando posteriormente a un asociado que "la moralidad no era [su] trabajo; la modificación de virus quiméricos sí". Aunque esto no le impidió realizar su trabajo, eventualmente descubrió el origen de las muestras del virus Redlight y la brutal historia que lo rodeaba.
La orden que cambió el mundo[]
En 2007, el Congreso de los Estados Unidos examinó el Proyecto Blacklight. Debido a potenciales fugas de información, el Congreso dictaminó proponer investigaciones, o de lo contrario Blacklight se paralizaría. Bajo órdenes del teniente general Peter Randall, Blackwatch orquestó una purga sobre todos los afiliados a la investigación, y Alex Mercer estaba en su mira. El propio Mercer se adelantó a los movimientos de Blackwatch gracias a que sabía de antemano la naturaleza de su trabajo, realizando una investigación interna de Gentek con ayuda de su hermana. Gracias a Dana, Alex se enteró de los vínculos de Gentek con Blackwatch y el cómo esta última había sido la responsable de la muerte de sus compañeros de equipo. Sabiendo que él era el siguiente, Mercer realizó el plan que le costaría no solo su vida, sino la de millones ajenos a la conspiración.
Brote de Manhattan[]

Artículo principal: Cronología
Tiroteo de Penn Station[]
En la noche del 24 de octubre del 2008, Mercer huyó de las instalaciones de Gentek con un vial del virus Blacklight con el propósito de exponer las atrocidades cometidas por Gentek y Blackwatch. Trató de huir de la isla de Manhattan a través de Penn Station, pero gracias a que realizó tres llamadas a diversos contactos (Karen Parker, Raymond McMullen y su hermana), Blackwatch pudo rastrear el origen de su última llamada y encontró su ubicación. Mercer fue acorralado en la estación por agentes de Blackwatch, y en un ataque de frustración y rabia, arrojó el vial al suelo, rompiéndolo y desatando el apocalipsis biológico.
La estación fue puesta rápidamente en cuarentena, y los soldados Specter que dieron de baja al objetivo informaron de la situación al propio general Randall. Sabiendo que ha llegado el día de enfrentarse nuevamente al infierno que él mismo había sellado hace casi 40 años atrás, Peter Randall autoriza la Operación Redlight: la contención del brote del virus Blacklight mediante el uso de la fuerza militar.
Respuesta militar[]
“ | Estamos aquí para asegurarnos de que lo que sucedió en 1969 jamás se vuelva a repetir. Todos conocen su deber. Cueste lo que cueste. | „ |
—Un oficial Specter instruyendo a sus hombres para el eventual despliegue en Nueva York. |
Como primer movimiento en esta decisiva partida de ajedrez, el general Randall asignó al coronel Ian Taggart un gran destacamento del Cuerpo de Marines estadounidense. El destacamento, posiblemente de tamaño brigada, fue desplegado y arribó a la isla para la madrugada del 25 de octubre. Paralelamente al despliegue del Cuerpo de Marines, Blackwatch planificaba el despliegue del Ejército, la Armada y Fuerza Aérea estadounidense, cuyas funciones serían el bloqueo militar de toda vía de salida de Manhattan: salidas terrestres, marítimas y aéreas. Por su parte, Blackwatch solo desplegaría un solo regimiento para la acción militar, razón por la cual las bajas militares fueron por parte del personal estadounidense regular.
El Tercer Día[]

Para el 27 de octubre, con las zonas del brote viral establecidas, y con ello la confirmación del virus en la isla, el general Randall comenzó a movilizar a los Marines con órdenes directas de detener a cualquier individuo dentro de las áreas del brote previamente dichas. La situación volátil del incidente lo obligó asignar al destacado capitán Robert Cross y su equipo, la Unidad Wisemen, la búsqueda y neutralización de Alex Mercer, cuyas actividades de traición contra el país y sus aliados lo habían convertido en "la amenaza terrorista número uno en los Estados Unidos".
En algún momento de la noche, en medio de Broadway, el Departamento de Policía de Nueva York recibió varias llamadas de gente aterrada que describía cómo habrían sido atacadas por monstruos. Lo poco que pudo hacer la policía fue brindar asistencia médica y solicitar apoyo de unidades cercanas. Los Marines estaban casi en la misma situación que la policía, pues de igual manera fueron atacados por aquellas bestias que supuestamente aparecieron por primera vez en los alrededores del edificio de Gentek. Sin que nadie supiera, Mercer había liberado a algo, o alguien, mucho peor que lo que había desatado en Penn Station: Elizabeth Greene, y por extensión, el virus Redlight.

La aparición estelar de Blackwatch
Finalmente, el regimiento de Blackwatch hace su aparición estelar en medio de Times Square, declarando ley marcial sobre toda la isla de Manhattan, y estableciéndose en Battery Park, que luego sería renombrado como Palacio tras su ocupación militar. Bajo órdenes del coronel Taggart, quien obedecía al general Randall sin titubear, elementos del Ejército y Cuerpo de Marines fortificaron cada uno de los puentes que conectaban con el continente, estableciendo bases militares temporales usando edificios ya existentes. La Armada bloqueó el Río Hudson y la Fuerza Aérea cerró el espacio aéreo de Nueva York. El establecimiento del bloqueo y cuarentena militar, aunque no se sabe en qué punto finalizó, dada la gran presencia militar, habría concluido con rapidez gracias al miedo a la propagación de la plaga.
Guerra con el enemigo equivocado[]

Personal del Ejército y/o Cuerpo de Marines atacando una Colmena con artillería.
Los primeros enfrentamientos entre tropas estadounidenses e infectados comenzaron cuando aparecieron las Colmenas, edificios infectados de alguna forma por el virus y reestructurados para ser "cuarteles generales" de las formas de vidas infectadas. Tras la confirmación de su función para el ejército infectado, Blackwatch enviaba a los Marines como tropas de choque con el fin de destruir las Colmenas. Sin embargo, dado que los Marines no estaban entrenados ni equipados para lidiar con la nueva amenaza, muchas de estas escaramuzas concluían con múltiples bajas y cuyo propósito real era la localización de los "objetivos primordiales" para las tropas Specter que luego arribaban al lugar y derrotaban al enemigo "ya debilitado".
El accionar Specter con respecto al manejo de las tropas regulares causó una desconfianza y repudio inicial por parte de los Marines, quienes tenían razones de sobra para ser antipáticos con las fuerzas de Blackwatch. Eventualmente, estos sentimientos se convirtieron en un odio absoluto, luego de que el personal regular fuera testigo de auténticos crímenes de guerra contra la población civil y ellos mismos, todos perpetrados por Blackwatch y su infame creencia en el fin justifica los medios. Gracias a este enfoque prácticamente sádico, los Marines estadounidenses se expresaron abiertamente del personal de Blackwatch como entusiastas, bárbaros, psicópatas sedientos de sangre e incluso Nazis.

Proyección de computadora sobre la propagación de la plaga en catorce días más.
Todos estos acontecimientos fueron provocados por la fuga de Elizabeth Greene, nombre en clave MOTHER, quien había tomado el control del ejército infectado y poco a poco se iba apoderando de Manhattan. En el penúltimo día de la primera semana de la Operación Redlight, la infección había consumido al 20% de la población. El hecho fue evidenciado por el científico Edgar Ruiz, quien tras analizar la situación del brote viral y darse cuenta de la aterradora propagación de la plaga, afirmó que Blackwatch se había preparado para la guerra con el enemigo equivocado. A partir de ese momento, las fuerzas estadounidenses tomarían un papel mucho más activo en su deber de contener la plaga que estaba azotando Manhattan.
Tras una discusión con el coronel Taggart, Peter Randall opta por emplear la alternativa nuclear como medida de último recurso, prefiriendo llevar a la plaga a la superficie, en gran parte con el propósito de recuperar a Elizabeth Greene sin daños. Dada su autoridad, es más que probable que el más papel activo de las fuerzas militares fue gracias a él. A partir de entonces, el segundo lapso de tiempo de la Operación Redlight estaría caracterizado por la lucha contra el ejército infectado mediante la táctica y estrategia militar, cualidades propias de la guerra convencional.
Sustancia A-113A[]
Artículo principal: Bloodtox
El 2 de noviembre de 2008, el personal de Gentek anunció el desarrollo de una nueva arma bioquímica que “exterminará a los infectados del virus Blacklight”. Debido a su coloración roja, la Sustancia A-113A fue renombrada como Bloodtox. Aunque casi nada de su composición química fue revelada, Gentek logró sorprendentemente que el arma fuera inocua para los seres humanos, afectando únicamente a los infectados por Blacklight.

Personal de Gentek probando el bioquímico Bloodtox sobre un infectado capturado.
Los efectos de A-113A, una vez introducido en el cuerpo infectado, afectan a todos los procesos biológicos. Los infectados sufren de una necrosis progresiva del tejido corporal, seguida de la muerte. El primer despliegue del bioquímico se dio durante la infiltración de Alex Mercer en el Palacio del 4 de noviembre. Fue también durante este evento donde los Supersoldados D-CODE harían su aparición, aunque cuatro de ellos murieron en acción durante su enfrentamiento contra Zeus.
Con la confirmación de la efectividad del Bloodtox sobre Zeus, en la tarde del mismo día, Blackwatch autorizó su despliegue sobre el sur de Manhattan. El despliegue del bioquímico causó finalmente la retirada de gran parte del ejército infectado, junto a su líder, al subterráneo de la isla. Aunque el despliegue en el sur fue interferido por Mercer para autosostenerse, la posterior retirada al subterráneo sería aprovechada por las fuerzas estadounidenses para bombear el bioquímico a las profundidades de Manhattan, lo que daría lugar al día siguiente al evento decisivo de la Operación Redlight: la Batalla de Times Square.
Batalla de Times Square[]
La Batalla de Times Square fue un largo enfrentamiento entre las fuerzas estadounidenses y Alex Mercer, contra la líder del ejército infectado, Elizabeth Greene. Con una duración inexacta, la Batalla de Times Square sería una victoria estratégica tanto para Blackwatch y fuerzas regulares por igual. Con la muerte de Greene a manos de Mercer, lo que concluyó la batalla, el ejército infectado quedaría desorganizado, lo que sería aprovechado por las fuerzas estadounidenses para realizar el exterminio del 21% de la población infectada, la misma que pasó del 81 al 60% en tan solo dos días. Esta gran acción militar, sin embargo, provocaría un contraataque en represalia que causó el colapso del control militar sobre la isla de Manhattan.

Alex Mercer observando la instalación de Bloodtox, de donde partiría el convoy estadounidense en dirección a Times Square.
La Batalla de Times Square comenzó el 5 de noviembre del 2008. Como parte de una operación militar de designación desconocida, Blackwatch optó por desplegar el bioquímico Bloodtox al subterráneo para purgar al ejército infectado en la superficie una vez que se vieran obligados a salir. Alex Mercer sería partícipe de esta gran acción militar, informado por su contacto de que era la única manera de enfrentarse directamente a Elizabeth Greene. Mercer asimiló al comandante Specter que originalmente encabezaría la operación, dando la orden de partir para enfrentarse al infierno sobre la tierra cara a cara.

Mercer, abordo de un blindado M1-Abrams, disparando contra una Hydra.
El trayecto del convoy estadounidense se vería obstaculizado por la presencia de fuerzas infectadas que harían lo imposible por detener el avance militar, sin lograr su objetivo. En la salida de Central Park, la gran fuerza estadounidense se vería comprometida por el ataque de tres Hydras que fueron rápidamente despechadas por los disparos de tanques. Estando en Times Square, la estrategia del ejército infectado se volvería a repetir, pero fue inútil de igual manera, permitiendo el ingreso del M270 MLRS modificado a Broadway.
Con el vehículo en posición, y las fuerzas estadounidenses resguardándolo, Mercer activa la maquina y comienza a desplegar todas sus reservas de Bloodtox al subterráneo de la isla. Al verse amenazada, Greene envía varias oleadas de Cazadores regulares y Líderes por igual, en un intento por destruir la maquina de despliegue. No obstante, con la ayuda de Mercer, las fuerzas militares pudieron repeler todas las oleadas.

Tras este despliegue inicial, los presentes en Times Square se verían sorprendidos ante el surgimiento de Greene de las profundidades de Manhattan, cubierta de una gran masa bulbosa. En un largo enfrentamiento donde fuerzas estadounidenses y Specter se verían forzadas a colaborar con Mercer para derrotar a Greene, el Cambiaformas Viral Alfa finalmente logra derrotar tácticamente todas y cada una de sus defensas. Estando completamente debilitada, Elizabeth Greene es derrotada y consumida por Alex Mercer, significando una victoria estratégica por parte de los estadounidenses y una derrota aplastante para el ejército infectado.
Debido a la desorganización de los infectados, las Fuerzas Armadas estadounidenses aprovecharían esta oportunidad para realizar una operación de exterminio contra la población infectada de Manhattan. En tan solo dos días, las fuerzas estadounidenses lograrían exterminar al 21% de la población infectada, posiblemente a través de bombardeos estratégicos sobre Colmenas y enfrentamientos directos en zonas de conflicto. Así, la operación de exterminio estadounidense resultó ser un éxito total, recuperando el control militar sobre la isla de Manhattan.
El asedio[]

Tropas Specter protegiéndose del contraataque infectado en el Madison Square Garden.
En algún punto no especificado del 8 de noviembre, diversas bases militares y puestos de refugiados fueron atacados o destruidos por el ejército infectado. El puesto de refugiados más grande de todos era el Madison Square Garden, el cual se llevó la peor parte del contraataque infectado. Los soldados estadounidenses presentes en el estadio, entre ellos tropas Specter, se defendieron como pudieron del ataque, soportando oleada tras oleada. La munición se iba agotando y las defensas caían poco a poco. Lo último que se supo de la situación del Madison antes de su caída fue que se perdieron entre el 30-40% de sus defensas. El saldo total de bajas civiles y militares se desconoce. Sin embargo, dada la alta capacidad del estadio, las cifras podrían rondar entre los miles.

Un soldado Specter cuestionado por el general Randall sobre la orden de evacuación.
Luego del Madison, le prosiguió el Palacio. Las defensas del puesto de mando de Blackwatch eran formidables, pero finalmente cayeron ante la plaga andante. El ataque contra Palacio fue motivo suficiente para que el coronel Taggart emitiera la orden de evacuación de todas las tropas estadounidenses presentes en la ciudad de Nueva York, en contra de la autoridad del general Randall, y comenzando de manera no oficial el ataque nuclear contra la ciudad: la Operación FireBreak. La orden no solo fue una insubordinación directa a la autoridad del general, sino que significó la pérdida del control militar al que las fuerzas estadounidenses se habían aferrado firmemente tras su victoria en Times Square.
Mientras las fuerzas militares remanentes en el Palacio se defendían del ataque, el general le ordenaría al capitán Cross la búsqueda y captura del desertor coronel Taggart y que lo llevara en cuatro horas al USS Ronald Reagan, el nuevo puesto de mando de Blackwatch. Al mismo tiempo, Randall ordenó sutilmente la preparación de un dispositivo nuclear para destruir la plaga desde su raíz.
Cazando al coronel[]

Luego de su intento fracasado de consumir a Raymond McMullen, Alex Mercer fue a la última localización de su contacto. Con la revelación de que su informante era el mismo oficial Specter que enfrentó hace días, el capitán Cross le explica que Randall está lo suficientemente loco como para destruir Nueva York con armas nucleares. Debido a los recientes incidentes, Taggart se ha vuelto un objetivo de Blackwatch por sus actos de deserción e insubordinación. Robert Cross le comenta a Mercer que el coronel planea huir mediante vía aérea. Mercer se ocupa de la flota que iba a evacuar al coronel, evitando que huya por aire.
Con sus medios de evacuación cortados, Taggart ha optado huir por vía terrestre. Cross le explica a Mercer cómo tropas Specter rebeldes se han unido al bando del coronel y formado barricadas para un trayecto seguro hasta el puente Brooklyn. Siguiendo la información del capitán, Mercer ataca y destruye la base bien defendida del desertor, procediendo a huir. Taggart muere durante esta persecución, al ser consumido por Zeus, dándole así a él y al capitán un billete de entrada al USS Ronald Reagan.
Batalla del Reagan[]
“ | Cuando la bomba detone, y crean que la infección está controlada, no me buscarán más. Y cuando te consuma, seré capaz de aguantar incluso esto. | „ |
—El Cazador Supremo revelando su identidad. |
Al abordar el portaaviones, el general Randall le da al capitán la bienvenida al último bastión estadounidense en Nueva York, no sin antes ejecutar al coronel Taggart, quien era en realidad el propio Zeus. Cuando Cross le pregunta sobre el destino de las tropas estadounidenses presentes en Manhattan si el dispositivo nuclear es detonado, el general Randall no se dio cuenta de que Mercer estaba detrás suyo decidido a revelarse. Poco después de la muerte del general, otra revelación es presentada a Mercer, cuando se da cuenta que Cross había muerto y fue consumido por el Cazador Supremo. Así, comenzó la Batalla del Reagan.

Mercer apunto de enfrentarse al Cazador Supremo.
La Batalla del Reagan fue el último evento documentado del Brote de Manhattan. Ocurrido el 11 de noviembre, se trató del enfrentamiento entre Mercer, apoyado por las tropas presentes en el lugar, contra el Cazador Supremo, el parásito usado contra él hace días, abordo del portaaviones USS Ronald Reagan de la Armada estadounidense. Fue un enfrentamiento a contra reloj ya que Peter Randall había activado el dispositivo nuclear y Mecer no pudo acceder a los códigos de desactivación gracias a la presencia del Cazador Supremo.
Varias unidades Specter arribaron al portaaviones y brindaron apoyo al Cambiaformas. Eventualmente, el Comando Red Crown solicita la evacuación de todas las tropas estadounidenses, incluso ordenando a toda aeronave aledaña al portaaviones que asista en las labores de extracción. Una vez que el Cazador Supremo está prácticamente debilitado, Alex Mercer usa su Espada para cortar su brazo izquierdo y luego procedió a decapitarlo.

El helicóptero de Mercer a punto de ser alcanzado por la onda expansiva.
Sabiendo que el dispositivo no puede ser desactivado, y su detonación sucederá pronto, Mercer se marcha del portaaviones en un viaje solo de ida. Abordando un helicóptero UH-60 Black Hawk con la bomba nuclear anclada al mismo, Alex llega a un punto desconocido del Océano Atlántico y suelta la bomba para que detone bajo el agua. Aunque la bomba llegó a detonar y destruyó casi todo el cuerpo de Mercer (pues fue alcanzado por la onda expansiva), sus restos llegaron a la bahía de Nueva York y pudo regenerarse por completo a partir de la biomasa de un cuervo. La verdad detrás de todo este incidente apocalíptico finalmente destruye a Mercer a nivel emocional, partiendo de Nueva York, y luego de los Estados Unidos, en un viaje de conciencia por el mundo.
La detonación nuclear en el Océano Atlántico fue claramente detectada, y los medios de comunicación afirmaron que el dispositivo empleado era aproximadamente de 75 kilotones, además de ser 5 veces más grande que la bomba nuclear que detonó en Hiroshima. Las fuerzas estadounidenses retomaron su operación de exterminio contra la población infectada gracias a su desorganización. Según un miembro del Cuerpo de Marines, "no parecen estar impulsados de la misma manera que antes. Ya no son una amenaza real".
Posteriormente, el gobierno en turno de los Estados Unidos daría sus declaraciones sobre el evento, representado por el vicepresidente y un senador de nombre Ambrose. El senador Ambrose declaró:
“ | Nueva York ha resistido el primer caso de terrorismo biológico y nuclear en la historia del mundo. Es un testamento para los hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas de los Estados Unidos que Nueva York resiste. Encontraremos a los responsables. Los sacaremos de su escondite y haremos que paguen. Dondequiera que estén, cuál sean las armas que posean, aprenderán su última lección: América no empieza las guerras, América las concluye. | „ |
Tras concluir sus acciones de exterminio, las fuerzas estadounidenses se retiran de la ciudad de Nueva York en algún punto entre mediados de octubre e inicios de noviembre, concluyendo así la infame Operación Redlight, pero siendo a la vez el inicio de la guerra con el enemigo equivocado...
Crímenes de guerra[]

El famoso incendio deliberado de un edificio durante el Brote de Manhattan.
Se entiende por crímenes de guerra a toda violación grave del Derecho Internacional Humanitario (DIH), cometida en el transcurso de un conflicto bélico. Durante la Operación Redlight, se perpetraron incontables crímenes de guerra contra la población civil y tropas estadounidenses por igual, todos cometidos por el personal de Blackwatch que mostraba incluso un júbilo cruel y sádico al realizar tales acciones. Aunque hayan sido cometidos en nombre de la supervivencia del mundo, no le quita su gravedad y el cómo fueron perpetrados, lo que habla mucho del tipo de adoctrinamiento al que el Primer Comando de Guerra Biológica somete a sus elementos, todo con el objetivo de deshumanizarlos y volverlos en lo más cercano a monstruos sin ninguna pizca de arrepentimiento y culpa por hacer lo que hacen: todo por su creencia implantada desde su reclutamiento de que el fin justifica los medios.
Uno de los mejores y peores ejemplos de la clase de crímenes de guerra cometidos por Blackwatch fue el incendio deliberado de un edificio aún con civiles dentro. Detalles como la zona de Manhattan en la que ocurrió y el número de víctimas son desconocidos, pero la atrocidad fue atestiguada por un Marine estadounidense, un cabo de nombre Tyrone Steuben, mismo que posiblemente reportó el hecho a un superior. El evento fue todavía peor, pues una mujer habría salido del fuego (con quemaduras de segundo e incluso tercer grado) y fue disparada mortalmente por un elemento Specter que solo se limitó a reírse.

El asesinato de una mujer a manos de un soldado Specter, con la hija de testigo. Las circunstancias son desconocidas.
El incidente habría resonado entre las fuerzas estadounidenses, despertando así las alarmas con respecto al personal de Blackwatch, que se ganó su clásica descripción por parte de los Marines donde estos se refirieron a las tropas Specter como prácticamente psicópatas carentes de humanidad, usándose por primera vez el término Nazi para describirlas. En las últimas etapas del Brote de Manhattan, esta desconfianza y repudio inicial se convirtió en un odio absoluto luego de que los Marines fueran testigo de aún más crímenes de guerra más brutales y sádicos. Incluso los propios Marines eran a veces víctimas de estas atrocidades, estuvieran infectados o no.

Otro crimen de guerra fue el ataque contra un avión ejecutivo que sobrevolaba el espacio aéreo de Nueva York, cometido por el teniente Specter Daniel Eckert. Eckert comenta este hecho como una simple anécdota a un compañero, afirmando que incluso la aeronave realizaba maniobras de evasión. Aún así, Eckert derribó la aeronave, matando a sus ocupantes. Aunque tenía órdenes directas de derribar toda aeronave no autorizada en sobrevolar el espacio aéreo, pues era parte de la organización que había instaurado este bloqueo militar, Eckert demostró su clara falta de empatía al mencionar este evento sin el más mínimo remordimiento, incluso imaginando las reacciones de los pasajeros al decirle a su compañero: "Estaba moviendo sus alas, como, ¡no disparen!"
Los crímenes de guerra volvieron a hacer aparición durante el Segundo Brote de Manhattan, tanto en su etapa inicial, como en la eventual acción militar para la armamentización del virus Blacklight en conjunto con Gentek. La compañía cometería igualmente sus atrocidades, solicitándole a las tropas Specter realizar el secuestro de civiles para experimentar con el virus en ellos, otro tipo de crimen de guerra todavía más grave y brutal. Incluso la destrucción de la mitad norte de Manhattan, cuyo nombre en clave fue Operación Damocles, pudo ser otro crimen de guerra de fondo, ya que dado el desdén Specter por la vida civil y militar regular, es posible que el bombardeo se haya llevado a caobo incluso con presencia militar o civil sin siquiera advertir sobre el ataque con antelación.
Figuras clave de la Operación Redlight[]
Peter Randall[]

El teniente general Peter Randall fue el único y último comandante en jefe conocido de las Fuerzas Especiales Blackwatch. Conocido como el viejo y por ser inquebrantable e implacable con su deber, Peter Randall estuvo al mando de todas las fuerzas estadounidenses desplegadas en la ciudad de Nueva York en el momento del brote del virus Blacklight, con el coronel Ian Taggart como poco más que su títere y chivo expiatorio, y usando cualquier medida para detener el avance de la plaga por la isla.
El general Randall fue en su momento el teniente que encabezó el primer cierre de las puertas del infierno en el pueblo artificial de Hope, Idaho: la Operación Altruistic. Al saber que el infierno sobre la tierra fue nuevamente desatado, Randall no dudó ni un segundo en lo que tenía que hacer. Por órdenes suyas, que luego fueron cumplidas por el coronel Taggart, la isla de Manhattan fue sometida a un impresionante bloqueo y cuarentena militar nunca antes visto, todo con el fin de asegurar la supervivencia de los Estados Unidos y del mundo.
A pesar de su terquedad, Peter Randall supo reconocer que la plaga no podría ser detenida por medios convencionales. Luego de la discusión con el coronel sobre una posible retirada estratégica, Randall movió sus influencias para obtener acceso a un dispositivo nuclear bajo el Protocolo FireBreak. Eventualmente, usó de excusa la orden de evacuación dada por su cobarde subordinado para preparar el ataque nuclear contra Nueva York.
Finalmente, murió a bordo del portaaviones USS Ronald Reagan a la edad de 70 años, creyendo que estaba haciendo lo correcto aún si eso implicaba cometer auténticas atrocidades.
Coronel Taggart[]

El coronel Ian Taggart fue el oficial del Cuerpo de Marines que estuvo al mando de las tropas estadounidenses desplegadas durante el Brote de Manhattan. Fue presentado como el oficial público de la ocupación militar de la isla, pero en realidad se trataba de un simple y cobarde peón que, cuando tuvo la oportunidad, desertó para salvarse a sí mismo, solo para que el final muriera producto de su propia cobardía.
Taggart tenía 45 años en el momento que fue asignado por el general Randall para una operación a gran escala en la Gran Manzana, debido al brote de una enfermedad desconocida. Para el final de la primera semana de la Operación Redlight, con la revelación al público de que todo se trataba de un ataque biológico contra la ciudad estadounidense más importante, Taggart discutió con Randall para sugerirle una retirada estratégica y ataque a distancia, misma sugerencia que el general luego reservaría al ver que la plaga no podría ser contenida mediante la fuerza militar convencional.
La gota que derramó el vaso para el coronel sería el aparente ataque en represalia del ejército infectado. Con el Palacio invadido, y las fuerzas estadounidenses dispersas por Manhattan, en un supuesto acto de valentía, Ian Taggart ordenó la evacuación de todas las fuerzas terrestres presentes en la isla. Tal acción aumentaría su popularidad entre las fuerzas regulares, oportunidad que aprovechó para hacer que propias fuerzas Specter se pasasen a su bando para idear su plan de evacuación propia.
Su tonta máscara de un comandante preocupado por la vida y seguridad de sus hombres se cayó abruptamente cuando Alex Mercer, siguiendo la información de Cross, destruyó su base bien defendida, obligándolo a huir. Presa del pánico, Taggart ordenó a sus hombres y al personal Specter rebelde que lo protegieran, lo que demuestra su hasta entonces oculto egoísmo. Ian Taggart fue consumido estando a pocos metros de salir de la isla mediante el puente Brooklyn, a manos de Alex Mercer.
Raymond F. McMullen[]

Siendo el investigador y director de la compañía Gentek, Raymond McMullen estuvo involucrado prácticamente en el desarrollo del virus Blacklight y trató de combatir su brote viral en la isla de Manhattan desde el punto de vista científico.
Fue responsable también del reclutamiento del joven Dr. Alexander J. Mercer, mismo que abriría las puertas del infierno. A pesar de ser un peligro para su trabajo, demostrando su benevolencia, McMullen trató de proteger a Alex de la purga orquestada por Blackwatch, llamándolo activo importante para el Proyecto Blacklight. Después de su muerte en Penn Station, la encarnación del virus Blacklight, Zeus, se volvió una obsesión para él, deseando saber con claridad el por qué de sus habilidades y el cómo representaba un peligro para su compañía y Blackwatch.
Antes de su muerte, prefiriendo el suicidio antes de revelarle más información a Zeus, McMullen fue vital en el apoyo científico para detener la plaga. Bajo su mando, Gentek desarrolló múltiples artilugios para Blackwatch, desde pasivas (como simples aparatos programados para detectar grandes tasas de infección), como agresivas (el bioquímico Bloodtox). Fue también gracias a él que Blackwatch supo rápidamente las habilidades de "camuflaje" que poseía el Cambiaformas al consumir otras formas de vida y el cómo los infectados estaban ciertamente organizados gracias a Greene (describiéndola como el corazón de la infección), todo gracias a sus hipótesis bien fundamentadas en base a pocas evidencias. Incluso se sugiere que Blackwatch traería a PARIAH, la encarnación perfecta del virus Redlight, para contener la crisis, a lo que McMullen se opuso explícitamente, pues de haber un enfrentamiento directo entre él y Zeus, ningún poder humano podría detenerlos. Gracias a McMullen, Blackwatch pudo hacerle frente en gran medida a la plaga sin recurrir, parcialmente, a protocolos nucleares.
Robert Cross[]

El capitán Robert Cross, también conocido como el Especialista, fue un joven destacado oficial Specter. Resistente, ingenioso y letal, el Especialista es enviado cuando las cosas no salen según el plan: la última medida de seguridad de Blackwatch.
Robert Cross era un teniente del Ejército estadounidense que, en 1998, fue reclutado por el Primer Comando de Guerra Biológica tras la Operación Ice Storm. Como capitán de Blackwatch, durante la intervención Specter en el estado de Arizona, Cross fue asignado para la caza de un Corredor, individuos infectados del virus Redlight que aún conservan su inteligencia. Demostrando sus habilidades, Cross rastreó al objetivo y por sí mismo lo neutralizó, con poco más que su experiencia dotada en combate cuerpo a cuerpo.
Con su asignación y la de su equipo para la búsqueda y neutralización de Zeus durante el 27 de octubre, se le otorgó a Cross un poderoso parásito que podría matar desde dentro al Cambiaformas. Al final de una escaramuza en el interior de una Colmena que concluyó con la victoria de Mercer y la muerte de casi toda su unidad, el capitán logra su objetivo al inyectar el arma al Ser de Blacklight, inhabilitando la altercación ofensiva y defensiva de su biomasa hasta que luego se curó de esta dolencia, misma que daría lugar a la bestia que acabó con la vida del joven soldado.
Eventualmente, el capitán descubrió el último recurso del general Randall: la ejecución de un ataque nuclear sobre Nueva York si esta plaga no lograba ser contenida. Enfrentando la prueba de que Blackwatch no era lo que él creía, en comparación con sus superiores y soldados subordinados, Robert Cross mostró culpa y arrepentimiento por sus acciones durante la acción militar, decidiendo finalmente traicionar a su organización para salvar Nueva York y tropas Specter y regulares por igual.
Sabiendo que el único capaz de detener todo esto era el mismísimo Satanás, Cross decide reunir todo el material clasificado necesario para luego contactar a Mercer de forma anónima, revelándole varias de las siguientes operaciones de Blackwatch para hacerse con el control de la isla, así como también su verdadera naturaleza como la propia encarnación del virus Blacklight. La decisión de Cross de apoyar a Mercer en su búsqueda de la verdad fue la razón principal detrás del éxito de la Operación Redlight, pues la aterradora realidad era que el virus Blacklight estaba más allá de lo desconocido y cuyas cualidades adaptativas superaban por lejos a las valerosas fuerzas estadounidenses, demostrando así que Blackwatch estaba en medio de una guerra con el enemigo equivocado.
La decisión de Cross fue vital para el éxito de la Batalla de Times Square: le reveló a Mercer el plan de Blackwatch para conducir a Greene y a su ejército infectado a la superficie mediante el uso del Bloodtox. Mercer siguió las indicaciones de su informante, hasta entonces desconocido, y logró matar a Greene. Con su muerte, estando desorientados y desorganizados, los infectados remanentes fueron una menor amenaza sin el mando de Greene, lo que llevó a la operación estadounidense de exterminio contra el ejército infectado.
No obstante, el contraataque del ejército infectado provocó la orden de evacuación militar por parte del coronel Taggart, un acto que fue una insubordinación directa a las órdenes del general Randall. Fue en algún momento durante la Caída del Palacio, que el capitán se enfrentaría a su último adversario, el mismo parásito que él mismo inyectó en Zeus días atrás. Robert Cross moriría a la sola edad de 38 años a manos del Cazador Supremo, quien usaría su apariencia para asegurar su supervivencia, objetivo que no fue logrado finalmente.
A pesar de no ser prácticamente recordado ni mencionado, Robert Cross murió con la idea de que sus acciones salvaron Nueva York de la locura de su organización, siendo el único soldado Specter en mostrar su humanidad en comparación al característico desdén y sadismo de Blackwatch por la vida civil y del personal militar regular.
Alex Mercer[]

Zeus es el nombre en clave puesto por Blackwatch que fue acogido por la entidad nacida de la asimilación de su creador, Alexander J. Mercer, con el vial del virus Blacklight. Estando completamente amnésico, huyó del edificio de Gentek y viéndose a sí mismo atrapado entre una creciente enfermedad (que su mismo creador desató tan solo horas antes) y una fuerza de operaciones especiales secreta y paramilitar que posteriormente demostraría que estaba dispuesta a cometer atrocidades con tal de detener el avance de una auténtica plaga.
El primer gran error de Zeus fue, siguiendo inocentemente la información proporcionada por ahora su conocida hermana Dana, liberar a Elizabeth Greene de su contención en Gentek. Esta no solo se mostraría hostil, dañando emocionalmente a Zeus al demostrarle parte de sus recuerdos, sino que sería la causa de la acelerada propagación del virus Blacklight y su predecesor, el virus Redlight, condenado así a millones de vidas estadounidenses en los siguientes 15 días documentados de la Operación Redlight. En su travesía en búsqueda de la verdad, Zeus se haría de muchos aliados que colaboraron a su manera en la misma, dándole más entendimiento sobre sí mismo y de los eventos que iban ocurriendo a lo largo de los días.
Eventualmente, el 5 de noviembre del 2008, sería contactado por quien anteriormente había derrotado, el capitán Robert Cross. Aún sin dar a conocer su identidad, Cross le revela todo lo que Blackwatch planeaba hacer para conseguir el control total sobre la isla, además de revelarle que desde hace tiempo dejó de ser humano, pues él mismo era el propio virus Blacklight. Dejando de lado el impacto de esta revelación, Zeus colaboró con el oficial Specter para evitar que el Primer Comando de Guerra Biológica tomara el control, saboteando el despliegue de su arma bioquímica en el sur e incluso siendo parte de la exitosa Batalla de Times Square, donde tuvo la oportunidad de matar a Greene y la aprovechó sin dudarlo.

Finalmente, Mercer (habiendo aceptado sus orígenes y adoptando el nombre de su yo humano) salvó Nueva York de una detonación nuclear, conociendo la verdad que tanto buscó y que ahora deseaba con desesperación poder olvidarla. Se decepcionó de las acciones cometidas tanto por su creador, afirmando que estaban "más allá del perdón", como por Blackwatch, en sus intentos de contener la plaga a través de atrocidades. Zeus nació en medio de una guerra que, sin saber, había iniciado gracias a su creador como por su propio nacimiento, siendo perseguido por las fuerzas estadounidenses al ser "la mayor amenaza terrorista en los Estados Unidos". Habiendo perdido su fe en la humanidad, Zeus parte de la ciudad de Nueva York en un viaje de conciencia que terminó siendo un fracaso absoluto, volviéndose casi igual que su creador y convirtiéndose en el propio verdugo de la especie a la que solía pertenecer.
A pesar de sus eventuales crímenes contra la humanidad, es de reconocer cómo Alex Mercer, aún sabiendo su poder y adaptabilidad ilimitada, siendo prácticamente un peligro en potencia, dejó de lado el shock de saber qué era en realidad y se concentró en detener una amenaza mucho mayor. Zeus era incluso más humano que el Dr. Alexander, sintiendo respeto por los valerosos soldados estadounidenses enviados a combatir en una guerra equivocada, así como por sentir preocupación genuina ante el secuestro de Dana, a pesar de no ser técnicamente su hermana, y finalmente sentirse impactado y repudiar el acto inhumano que realizó su creador aquella fatídica noche en Penn Station: todo por haberle negado saber información que no le correspondía, y que aún sabiendo las posibles consecuencias, cometió el acto que condenó a millones de inocentes.
La historia de Zeus es trágica por sí sola, tal cual la historia de su creador. Su eventual pérdida de fe demuestra, desgraciadamente, la degradación mental de un ser sensible que nació en una guerra que no le correspondía, siendo víctima de las acciones pasadas de quien sería su "padre" y viéndose forzado a ser un monstruo con tal de sobrevivir y saber la verdad detrás de su existencia, objetivo que perseguiría sin piedad hasta darse con una aterradora revelación... Había dejado de ser humano desde hace mucho tiempo, siendo ahora la encarnación de un virus que fue diseñado para causar muerte y dolor, cuya existencia era el resultado de la atrocidad que cometió el Dr. Alexander J. Mercer en nombre de conocer la verdad aquella noche del 24 de octubre. Esto último le chocaría profundamente a Zeus, ya que se dio cuenta que había cometido actos incluso peores con el fin de conocer la verdad detrás de su naturaleza, impulsado por aquello que deseaba y que la muerte de su creador le había arrebatado: una historia, una vida, una clara cadena de acontecimientos que finalmente condujeron a este depresivo presente.